Durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), se han transferido a los militares más de 246 funciones civiles, lo que ha fortalecido la jerarquía castrense y debilitado la supervisión sobre sus tareas, según un editorial del periódico estadounidense Washington Post publicado este miércoles.
El texto, que refleja la opinión de los directivos del diario, se publica tras alertas de otros medios internacionales, como el Wall Street Journal y el Financial Times, sobre la consolidación del autoritarismo y el creciente poder del crimen organizado en México.
El editorial del Washington Post destaca la creciente influencia de las fuerzas armadas en asuntos más allá de la política de seguridad. «Este gobierno transfirió 15 compañías públicas a la administración militar, entre ellas dos aeropuertos, una aerolínea y el Tren Maya. Los presupuestos combinados de la Marina y el ejército superan los 316 mil millones de pesos (18 mil 600 millones de dólares), lo que representa el triple del presupuesto destinado a salud, cifra que no incluye 67 mil millones de pesos asignados a la Guardia Nacional, el cuerpo creado para reemplazar a la policía federal», señala el editorial.
El diario identifica la asignación de nuevas tareas al ejército con el empeño del gobierno de López Obrador por limitar el poder civil, incluyendo intentos por controlar al Poder Judicial y desaparecer el Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI) y el Instituto Nacional Electoral (INE).
El presidente considera que las fuerzas armadas son leales y representan una mejor alternativa a una burocracia que él califica de corrupta, construida por gobiernos anteriores. Sin embargo, está por verse si esa lealtad se mantendrá con su sucesor, ya sea su favorita, Claudia Sheinbaum, o la opositora, Xóchitl Gálvez.
