El avión que transportaba al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, enfrentó problemas técnicos poco después de despegar del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) tras su participación en la toma de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta de México. La aeronave de la Fuerza Aérea Brasileña, matrícula BRS1, se vio obligada a regresar al aeropuerto debido a la emergencia.
Según el comunicado de la Fuerza Aérea de Brasil, el equipo de pilotos tuvo que realizar varias maniobras sobre el Valle de México durante horas para reducir el nivel de combustible antes de intentar aterrizar nuevamente en AIFA. Este protocolo de seguridad fue ejecutado para minimizar riesgos en caso de una emergencia mayor durante el aterrizaje.
Incidente gestionado con éxito y cambio de aeronave
Afortunadamente, el incidente no pasó a mayores. Lula da Silva fue atendido por el equipo médico debido a la tensión generada por la situación, pero su estado de salud no presentó complicaciones serias. El presidente brasileño fue trasladado posteriormente a una segunda aeronave para continuar su regreso a Brasilia, según fuentes oficiales.
Visita oficial de Lula da Silva a México
Lula da Silva llegó a México el pasado 29 de agosto para participar en una serie de actividades oficiales. Durante su visita, sostuvo una reunión con el expresidente Andrés Manuel López Obrador, con quien compartió un almuerzo en compañía de varios líderes latinoamericanos. Además de asistir a la toma de protesta de Claudia Sheinbaum, el mandatario brasileño participó en el Foro Empresarial Brasil-México, evento clave para fomentar las relaciones comerciales entre ambas naciones.
Impulso a las relaciones económicas entre Brasil y México
En su discurso durante el foro empresarial, Lula da Silva subrayó la importancia de estrechar los lazos comerciales entre México y Brasil. Reconoció el peso que tiene la relación económica de México con Estados Unidos, pero instó a los empresarios mexicanos a mirar hacia el sur, resaltando el potencial de Brasil como socio estratégico.
«Entiendo la relevancia de la relación entre México y Estados Unidos, pero eso no debería impedir que México explore oportunidades con Brasil, un país con 200 millones de habitantes y una economía significativa», señaló el presidente brasileño, destacando la necesidad de aprovechar el potencial no explotado en las relaciones comerciales entre ambos países.
El foro contó también con la participación de Marcelo Ebrard, próximo secretario de Economía del gobierno de Sheinbaum, quien aseguró que la «avenida» comercial entre México y Brasil es «muy ancha», y destacó el interés de la administración entrante en fortalecer los vínculos económicos con la nación sudamericana.
Este encuentro sirvió como plataforma para discutir posibles nuevos acuerdos comerciales entre ambos países, con la intención de aprovechar más del 70% del potencial económico que aún no ha sido utilizado. Lula da Silva enfatizó que una política comercial robusta debería beneficiar tanto al pueblo mexicano como al brasileño.
