El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, acusó públicamente a siete ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de actuar como “fascistas, perversos y golpistas” al intentar seguir analizando la reforma judicial impulsada por el gobierno de Morena. En una rueda de prensa sin otros representantes de Morena o de la Mesa Directiva, el senador cuestionó duramente a los ministros que votaron a favor de revisar posibles inconstitucionalidades en la reforma, describiéndolos como una “pandilla de abogados enloquecidos”.
Fernández Noroña afirmó que la Suprema Corte estaría poniendo en riesgo el orden constitucional al considerar la posibilidad de revertir aspectos de la enmienda judicial. En sus palabras, la decisión de los ministros está “en las puertas de la ilegalidad”, y sostuvo que, como legislador, hará valer la Constitución.
En contraste, Fernández Noroña reconoció la postura del ministro Alberto Pérez Dayán, quien votó en contra de la procedencia de las acciones de inconstitucionalidad promovidas por los partidos PRI, PAN y Movimiento Ciudadano. El senador destacó que Pérez Dayán tomó una “decisión difícil” en un clima de fuertes críticas y “violencia” en su contra, en referencia a la presión política y mediática que ha rodeado el debate.
Además, Fernández Noroña elogió a las ministras afines a Morena —Loretta Ortiz Ahlf, Lenia Batres y Yasmín Esquivel—, quienes se han alineado con el bloque oficialista y han defendido la reforma judicial bajo el argumento de que refleja un mandato popular.
La reforma judicial ha generado una confrontación entre los poderes Ejecutivo y Judicial en México. Esta modificación busca establecer la elección de jueces mediante voto popular y alterar el sistema de ascenso en el Poder Judicial, cambios que han sido respaldados por el partido Morena y el gobierno de Claudia Sheinbaum, pero cuestionados por la oposición y sectores de la judicatura, quienes ven en ello una amenaza a la independencia judicial.