Un equipo de geólogos chinos ha identificado dos nuevos minerales en el yacimiento de Bayan Obo, situado en la región de Mongolia Interior, según informó la Academia de Ciencias de China.
Los minerales recién descubiertos, denominados oboniobita y scandio-fluoro-eckermannita, contienen niobio y escandio, respectivamente. Estos elementos son altamente valorados por su escasez y sus aplicaciones en sectores críticos como la tecnología de materiales avanzados, la energía renovable, la industria aeroespacial y la defensa.
La scandio-fluoro-eckermannita es notablemente el primer mineral descubierto en China que contiene escandio, un material clasificado entre las 17 tierras raras más valiosas.
El académico Li Xianhua, citado por la agencia estatal Xinhua, destacó la relevancia de estos minerales para el «desarrollo económico y social del país». Li Xiao, director general de la empresa siderúrgica Baotou Steel, que participó en la investigación, enfatizó la riqueza mineral del yacimiento de Bayan Obo, reconocido como la mayor fuente de tierras raras del mundo.
En respuesta a estos descubrimientos, China ha reforzado su control sobre las tierras raras, materiales de los que el país controla más del 80% de la producción mundial. Recientemente, se promulgó una nueva ley que establece que los recursos de tierras raras «pertenecen al Estado y ninguna organización o individuo podrá reclamarlos o destruirlos». El Estado será el encargado de «implementar una minería protectora» de estos yacimientos.
Desde 1959, se han descubierto 18 nuevos minerales en el yacimiento de Bayan Obo, según Xinhua. Este hallazgo subraya la continua importancia de la región como una fuente vital de recursos minerales críticos para diversas industrias a nivel global.