El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó el viernes de incumplimiento de contrato a la empresa estadounidense SAT Aero Holdings, arrendadora de aviones que la semana pasada demandó en Nueva York a la nueva aerolínea estatal Mexicana, administrada por el Ejército.
López Obrador desestimó la denuncia de la compañía, que reclama cerca de 840 millones de dólares a las Fuerzas Armadas de México por costos, daños y perjuicios, argumentando que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) no cumplió con el pago para alquilar las aeronaves.
El mandatario respondió en su conferencia matutina que «esta empresa incumplió un contrato que se suscribió con la nueva empresa Mexicana y no son serios porque habían quedado en entregar los aviones en una fecha y no cumplieron».
«Entonces lo que se hizo fue que se suspendió el contrato y ellos se sintieron afectados y acuden a esta denuncia, son los clásicos leguleyos que piensan que con denuncias van a robar, nada más que se vayan a robar más lejos porque aquí ya no se puede», añadió.
Mexicana de Aviación, reanudó operaciones el 26 de diciembre pasado tras su quiebra en 2010 y el rescate de López Obrador, quien entregó su control al Ejército.
La compañía aérea, con una inversión inicial de 4 mil millones de pesos (casi 241 millones de dólares), empezó con tres aviones Boeing 737-800 propios y dos Embraer alquilados, con la promesa de rentar cinco más en el primer bimestre de 2024 y la próxima fabricación de aeronaves Boeing.
SAT Aero Holdings, con sede en Texas, alegó en su demanda que Mexicana no pagó más de 5.5 millones de dólares para el alquiler de las dos primeras aeronaves de un total de 10.
