La salida del penal del Altiplano, en el Estado de México, del exgobernador de Puebla, Mario Marín, ha sido retrasada debido a investigaciones en curso sobre posibles causas pendientes en otras entidades del país, informó su abogada, Araceli Andrade.
Mario Marín, quien fue gobernador de Puebla y está acusado de tortura, esperaba continuar su proceso en libertad tras un cambio en la medida cautelar que le otorgaba la libertad provisional. Sin embargo, la jueza federal con sede en Quintana Roo, Angélica del Carmen Ortuño Suárez, amonestó al director del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) No. 1 por no liberar de inmediato al exgobernador luego de que se modificara la medida cautelar.
Según la información proporcionada, las autoridades penitenciarias realizaron 43 solicitudes a diversas instancias, incluyendo la Fiscalía General de la República (FGR), fiscalías estatales y las 32 entidades federativas, para verificar si existen órdenes de aprehensión, carpetas de investigación o procesos penales pendientes contra Marín.
Mientras se resuelve este trámite, Mario Marín permanece en el centro penitenciario. No obstante, Araceli Andrade, quien es defensora de la periodista Lydia Cacho, víctima de tortura y quien denunció a Marín, aseguró que la liberación de su cliente debe cumplirse hoy, martes.
«La jueza ya dictó un acuerdo ordenando la inmediata libertad, advirtiendo que, de no cumplirse, las autoridades del Altiplano serán penalmente responsables. Aunque aún no ha sido liberado, se espera que ocurra en el transcurso del día», afirmó Andrade.
Cabe recordar que el sábado pasado se ordenó el cambio de medida cautelar, y el domingo se realizó la prueba del brazalete electrónico con el que Marín será monitoreado. Sin embargo, hasta la mañana de este martes, no se había cumplido la orden de liberación.
Las acusaciones contra Mario Marín se derivan de los hechos expuestos en el libro Los demonios del Edén, publicado en 2005 por la periodista Lydia Cacho, donde se reveló una red de explotación sexual infantil que involucraba a empresarios como Jean Succar Kuri y Kamel Nacif Borge, este último amigo cercano de Marín.
Marín fue arrestado en febrero de 2021 en Acapulco, Guerrero, por su presunta participación en actos de tortura contra Lydia Cacho, un caso que ha generado un fuerte rechazo tanto a nivel nacional como internacional debido a los años de impunidad.