En medio de las crecientes protestas en México contra la reforma judicial impulsada por la administración de la 4T, la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, lanzó una pregunta crucial: ¿pueden los jueces detener el avance de esta iniciativa en el Congreso?
La consulta fue presentada el jueves 5 de septiembre como parte del trámite 1/2024, en el cual Piña solicitó a sus colegas que se pronuncien sobre la petición presentada por la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed). La pregunta central gira en torno a si la SCJN tiene la facultad de emitir medidas cautelares para frenar temporalmente el avance de la reforma.
En el documento, se plantea al Pleno de la Corte lo siguiente:
«¿Puede la presidencia de este Alto Tribunal, al conocer de un asunto en los términos del artículo 11, fracción XVII de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, pronunciarse sobre la procedencia de las medidas cautelares solicitadas?»
El caso fue asignado a la ministra Lenia Batres, quien ha respaldado firmemente la reforma judicial promovida por el presidente López Obrador. Será ella quien presentará el tema al Pleno de la Suprema Corte para su análisis y discusión.
Jueces Piden Intervención de la Corte
El 3 de septiembre, la Jufed solicitó formalmente a la SCJN que frene la discusión y eventual aprobación de los cambios a la ley, los cuales ya fueron aprobados en la Cámara de Diputados. La asociación, que representa a jueces y magistrados federales, pidió que la Suprema Corte tome todas las medidas necesarias para proteger el actual sistema judicial del país y garantizar la separación de poderes.
«Se deben ejercer todas las acciones necesarias para mantener el contrapeso entre los poderes de la Unión, tal como lo establece la Constitución», afirmó la Jufed en su comunicado.
Además, la organización pidió que la SCJN adopte una postura firme en defensa de la independencia del Poder Judicial y que se mantenga la actual estructura hasta que se realice un diagnóstico exhaustivo sobre los problemas que afectan al sistema, tales como la corrupción, la inseguridad y la impunidad.
¿Qué Sigue para la Reforma?
El avance de la reforma judicial ha generado una fuerte oposición no solo entre los jueces y magistrados, sino también entre diversos sectores de la sociedad. Aunque la Cámara de Diputados ya aprobó los cambios, aún falta la revisión del Senado y la posible intervención de la Suprema Corte.
El debate sobre si la Corte puede frenar la reforma se ha intensificado, y la respuesta a la consulta planteada por Norma Piña será clave para determinar el curso de los próximos acontecimientos. Mientras tanto, las protestas continúan en las calles, reflejando el malestar de una parte importante de la población que teme que la reforma comprometa la independencia judicial en México.