El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha vuelto a lanzar duras críticas contra México, afirmando que el país está controlado por los cárteles de la droga. En una entrevista con Fox News, Trump, acompañado por su candidato a la vicepresidencia, el senador por Ohio J.D. Vance, acusó al gobierno mexicano de estar bajo el dominio de los cárteles. «Los cárteles son los que administran México», afirmó Trump.
La entrevista, parte de la campaña republicana, incluyó detalles sobre sus planes para llevar a cabo la mayor operación de deportaciones en la historia de Estados Unidos. Trump argumentó que era necesario expulsar a «gente muy mala» del país, comparando su plan con el del expresidente Dwight Eisenhower. «Tenemos que sacar a gente muy mala de este país (…) Será más difícil que cuando lo hizo Eisenhower, pero no tenemos otra opción», dijo Trump.
Durante la convención nacional republicana en Milwaukee, Wisconsin, los simpatizantes de Trump mostraron pancartas con la leyenda “deportación masiva”. Trump prometió llevar a cabo la mayor redada organizada por el Poder Ejecutivo estadounidense y amenazó con cerrar la frontera con México si vuelve a la Casa Blanca.
Además de sus declaraciones sobre deportaciones, Trump criticó la pérdida de influencia del sector automotriz estadounidense debido a la instalación de fábricas chinas en México, a pesar de que actualmente solo una empresa china, JAC, opera en territorio mexicano. Los analistas consideran estas afirmaciones como una exageración del expresidente.
Estas declaraciones han aumentado las tensiones con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. El presidente mexicano reveló una carta que envió a Trump, donde le recordó la importancia de la relación comercial entre ambos países y advirtió que cerrar la frontera sería perjudicial para ambos lados. «Entiendo que usted está en campaña… cerrar la frontera sería equivalente a convocar a una rebelión a ambos lados de la frontera», escribió López Obrador.
López Obrador también comentó sobre el reciente anuncio de Elon Musk de pausar la construcción de una planta de Tesla en Nuevo León hasta después de las elecciones en Estados Unidos. Musk, un conocido simpatizante de Trump, afirmó que esperará a ver el resultado de las elecciones antes de continuar con el proyecto. López Obrador calificó de “no serias” las afirmaciones de Musk y aseguró que los costos de producción en Estados Unidos serían muy altos.
Por su parte, la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, respondió con un tono más serio a las palabras de Trump. En una rueda de prensa, Sheinbaum aseguró que México ha avanzado en la disminución de la inseguridad y se comprometió a trabajar con Estados Unidos para abordar el problema, defendiendo siempre la soberanía del país.
Sheinbaum destacó sus supuestos logros en la reducción de la violencia durante su gestión en Ciudad de México. Sin embargo, la reciente muerte del policía Milton Morales, uno de los ejecutores de su estrategia de seguridad, ha generado dudas. Morales fue asesinado el pasado domingo en el Estado de México, y las autoridades están investigando si los cárteles de la droga están detrás del homicidio.