En distintas colonias como Nonoalco, Álvaro Obregón; y Narvarte, Nápoles y Del Valle, Benito Juárez, residentes han expresado preocupación por el estado del agua potable que reciben en sus hogares, reportando un olor desagradable y una apariencia inusualmente grasosa.
A través de redes sociales y grupos vecinales, habitantes han compartido experiencias sobre el agua que les llega, describiendo olores similares a gasolina o solventes, así como una sensación grasosa al tacto. Algunos incluso han experimentado irritaciones en la piel y los ojos después de utilizar el agua.
Ante estas denuncias, autoridades locales tomaron muestras del agua para su análisis, destacando la presencia de una capa aceitosa en algunos casos. A pesar de los reportes ciudadanos, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) aseguró que los resultados de las pruebas realizadas indican que el agua es apta para el consumo humano y cumple con los estándares de calidad establecidos por la normatividad vigente.
Sin embargo, vecinos continúan expresando preocupación y solicitando mayor claridad sobre la calidad del suministro de agua en sus comunidades. En este sentido, las autoridades se comprometieron a seguir monitoreando la situación y a mantener informada a la población sobre cualquier novedad relacionada con este tema.